Situada al pie del monte Ereñozar, la cueva de Santimamiñe representa el yacimiento arqueológico más importante de Bizkaia. En su interior se han encontrado restos de asentamientos humanos desde el Magdaleniense medio (c. 14 000 años antes del presente) hasta el Calcolítico (c. 4000 años antes del presente) y alberga casi medio centenar de pinturas rupestres. En 2008, el yacimiento fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
